El exfoliante facial sirve para limpiar y eliminar impurezas en la piel del rostro. Por lo tanto, este tipo de productos cosméticos ayudan a mejorar la apariencia de la piel. Además de su función limpiadora, el uso del exfoliante en la cara purifica la piel y puede reducir el acné y algunas manchas. De cara a tener una piel más cuidada es esencial incluir algún producto exfoliante en tu rutina diaria.

Mejora visiblemente la apariencia de tu piel

QUÉ ES LA EXFOLIACIÓN

De acuerdo con el diccionario de la RAE, exfoliar proviene del latín “exfoliare” que significa deshojar. Para entender qué es exfoliar podemos definirlo como quitar capas de la piel. Usualmente las capas que se quitan contienen células muertas, acumulación de grasa o suciedad.

Por lo tanto, exfoliar ayudará a la piel a deshacerse de aquello que no le sirve, y que, por el contrario, le afecta negativamente. Existen diferentes formas de realizar este proceso. Puede ser aplicando productos sobre el rostro o con ayuda de la aparatología y tecnología más avanzada. Lo más importante es mantener sana tu piel y mejorar su aspecto.

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EXFOLIANTE: PARA QUÉ SIRVE

Si te has preguntado para qué sirve un exfoliante, debes saber que tiene muchos beneficios. Como hemos apuntado al principio, limpia y purifica, pero también ofrece otras ventajas:

Elimina las células muertas:

Tanto un exfoliante corporal como uno de rostro eliminan las células ya desprendidas o muertas de la piel.

Estimula el flujo sanguíneo:

Los movimientos realizados al aplicarlo estimulan el flujo sanguíneo del rostro.

Promueve la regeneración celular:

De acuerdo con la Clínica Dermatológica Internacional, retirar las células muertas de la piel promueve la renovación más rápida. Como consecuencia, ayuda a prevenir signos de envejecimiento como las arrugas.

Previene la obstrucción de poros:

Al exfoliar la piel se retiran las impurezas de su capa superficial. De esta manera los poros quedan libres.

Elimina puntos negros e imperfecciones:

Con este tipo de procedimientos se elimina el exceso de sebo y la suciedad. Por ello reduce e incluso elimina las imperfecciones.

Ayuda a la mejor absorción de otros productos:

Al eliminar las células muertas y la suciedad, permitimos que productos, como cremas o sueros, penetren hasta las capas más profundas de la piel.

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TIPOS DE EXFOLIANTE

Es importante conocer los tipos de exfoliantes y, sobre todo, es necesario que conozcas tu tipo de piel para elegir el más adecuado. Recuerda que antes de aplicarlos debes tener la piel limpia. A continuación, te explicamos cuáles son las principales categorías.

  • Exfoliantes físicos: contienen pequeñas partículas o granos que, de manera mecánica, remueven las células muertas. Incluso pueden ser elaborados con ingredientes naturales como el azúcar o la miel. Ideales para pieles grasas. Poco recomendable para pieles sensibles. 
  • Exfoliantes químicos: suelen tener una concentración de ingredientes activos potente y disuelven las células muertas sin necesidad de frotar. Si te has preguntado para qué sirve la crema exfoliante limpian y ayudan a tratar otros padecimientos. Por ejemplo, las secuelas del acné, algunas manchas y líneas de expresión. Ideal para piel seca.
  • Exfoliantes enzimáticos: Los exfoliantes enzimáticos son la forma más suave que existe de exfoliar. Este tratamiento es altamente recomendado para pieles sensibles. Se basa en el uso de activos naturales que ayudan a renovar la piel. Están hechos casi siempre de frutas como la papaya y la piña por sus enzimas.

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CONSIDERACIONES PARA EXFOLIAR TU PIEL

Para obtener el mayor provecho de tu exfoliante, es importante que tomes en cuenta algunos aspectos al realizar tu rutina. A continuación te explicamos qué acciones debes llevar a cabo para lucir una piel pura y radiante.

Frecuencia

Para que la exfoliación resulte efectiva debes de ser constante durante el proceso. Sin embargo, también debes tener mucho cuidado para no excederte e irritar tu piel. De acuerdo con la Clínica Dermatológica Internacional, lo ideal es exfoliar el rostro de 2 a 3 veces por semana.

Suavidad

Elegir el exfoliante correcto no es lo único importante en la rutina de cuidado de la piel. Aplicar correctamente tus productos también lo es. En el caso de los exfoliantes físicos debes realizar movimientos circulares sin ejercer demasiada presión o fuerza. Con los exfoliantes físicos usualmente no debes masajear tu rostro pero es importante que lo apliques realizando movimientos ascendentes.

Hidratación

Sin importar tu elección de producto, al terminar de utilizarlo retíralo por completo de preferencia con agua tibia o agua fría. Lo más importante es utilizar sérum o cremas hidratantes inmediatamente después. Este paso es fundamental después de una exfoliación ya que tu piel quedará un poco deshidratada y es fundamental que reciba nuevamente nutrientes y humedad.

Ahora que sabes para que sirve exfoliar la cara te recomendamos incluir este método en toda rutina de skincare. Sin embargo es importante utilizar los productos y métodos adecuados para cada tipo de rostro. En Face Evidence te ayudaremos a encontrar el producto ideal para mejorar la apariencia de tu piel.

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